Como muchas grandes estrellas, el actor empezó desde abajo: sin diálogos y siendo un extra en una película
Antes de convertirse en ganador del Oscar a Mejor actor de reparto, en toda una estrella internacional y en productor de renombre, Brad Pitt tuvo una experiencia vergonzosa interpretando su primer papel en el cine. El actor de F1 (2025) y Érase una vez en… Hollywood (2019) comenzó en la industria como muchos: desde abajo, dando vida a un extra y sin ningún diálogo que decir.
Antes de participar en Thelma & Louise (1991), Pitt fichó por La tierra de nadie (1987), un filme de acción criminal escrito por Dick Wolf y dirigido por Peter Werner. Cuando el actor consiguió el trabajo, hace 38 años, todavía no había sido admitido en el Screen Actors Guild (SAG), el sindicato que ayuda a los actores en sus carreras. Claro que, para entrar en él se necesitan ciertos requisitos: completar tres días de trabajo como extra o un día como actor principal o en un papel con diálogo.
Cabe destacar que los extras que tienen diálogo no cuestan lo mismo que los que no tienen. Los primeros son más caros que los segundos. Por ello, cuando Pitt, que daba vida a un camarero, dijo una frase de forma espontánea, casi le cuesta el despido.
“Haces eso otra vez y estás fuera”

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“Todo el asunto era: ¿cómo conseguir la tarjeta del SAG? Porque no puedes conseguir trabajo sin ella, pero no puedes conseguirla sin haber trabajado. Es un dilema sin solución”, contó Pitt en el podcast Armchair Expert. Pitt, por lo tanto, intentó algo que, como admitió, todavía le atormenta.
“Es una escena de un restaurante. Los protagonistas son Charlie Sheen y D. B. Sweeney y un puñado de otros actores de los que no estaba al tanto. Soy el camarero. Tengo que abrir el champán y servirlo. Me enseñaron cómo hacerlo. Tienes que servir. Te das la vuelta. Giras. Limpias”, recordó. “Como un idiota, están haciendo la escena, llego a la última actriz, que ¿parecía estar más por debajo en la jerarquía? ¿Quizás? Y, literalmente, la escena seguía, le sirvo champán y le digo: ‘¿Quiere algo más?’. Dicen: ‘¡Corte! ¡Corte! ¡Corte!“.
El asistente del director fue hacia Pitt y le dijo: “Haces eso otra vez y estás fuera”. “Estuve avergonzado toda la noche”, reconoció Pitt.
Después de esta película, Pitt tuvo dificultades durante algunos años más y estuvo interpretando pequeños papeles en televisión, incluso participó en la mítica Dallas (1978). El lado oscuro del sol (1988) fue su primer papel en el cine. Fue Thelma & Louise la película que cambió su vida. El título de Ridley Scott catapultó su carrera. El resto es historia.