Puede que no mucha gente recuerde esta película, pero acierta más de lo que jamás lo harán ‘Los Simpson’
Es imposible no recordar el día que Robin Williams murió. De repente, hubo como un halo de tristeza en todo el mundo, la certeza de que nunca habría nadie como él. Un improvisador nato, una de las personas más graciosas del mundo, aquel que fue capaz de animar a Christopher Reeve, el mismísimo Superman, después de su accidente. Todo el mundo quería a Robin Williams, pero el 11 de agosto de 2014 tuvimos que decirle adiós a la fuerza. Y casi nadie recuerda cuál fue la última película que rodó en vida.
Robin, te echamos de menos
Claro, todos pensamos en Jumanji, Aladdin o Señora Doubtfire al imaginar a Williams, pero nadie se acuerda de El hombre más enfadado de Brooklyn, el remake de una película israelí llamada Mar Baum en la que un hombre recibe la noticia de que solo le quedan 90 minutos de vida, y corre por la ciudad tratando de arreglar sus errores. Decir que no gustó mucho a la crítica es ser generoso: de hecho, si es recordada por algo es simplemente porque dos meses y medio después de su estreno, Williams se suicidó.
Y en un momento dado, que helaría la sangre a cualquiera, pide que en su tumba aparezca el nombre de su personaje, Henry Altmann, con el año de su nacimiento y el de su muerte: 1951-2014. Efectivamente, el actor nació el 21 de junio de 1951 y murió en 2014. Una casualidad muy triste y que, si veis la película, hará que no podáis pensar en otra cosa.

lionsgate
Todo el mundo quería a Robin Williams, y a día de hoy le seguimos echando de menos. Habrían sido once años más de risas, declaraciones estrambóticas, humor a pesar de todo. Era uno de los grandes. Y aunque siempre se dice que los famosos no son tus amigos, creo que podemos hacer una excepción de oro con él.