Tom Cruise aún no era nadie la primera vez que saludó a Dustin Hoffman. Bueno, sí, había estado nominado al Globo de Oro por Risky Business, pero aún era un gran desconocido en la industria. De hecho, cuando se le encontró en un restaurante de Nueva York en 1984, ni siquiera pensó en saludarle: fue su hermana la que insistió constantemente en que le saludara. De hecho, ella le amenazó diciendo “Si no vas y le dices hola, lo haré yo misma”. Cruise suspiró, dijo “¡Ay, dios mío!”, se levantó y le saludó. Para su sorpresa, Hoffman no solo se sabía su nombre, sino que les invitó a ver Muerte de un viajante, que estaba representando en Broadway esos días… Y le dejó una última sorpresa final.
¿Quién quiere ver esto?
Por aquel entonces, Cruise estaba rodando Legend y decidiendo qué tipo de carrera quería tener, pero Hoffman lo vio muy claro: le invitó al backstage de su obra teatral y le dijo “Oye, tú y yo vamos a hacer una película juntos algún día”. Lo creía de verdad: dos años después le mandó el guion de Rain Man, y el resto ya os lo sabéis. Bueno, más o menos.
Lo cierto es que ambos se pasaron dos años desarrollando e intentando sacar la película adelante, e incluso tuvieron que pasar por cuatro directores distintos antes de caer en Barry Levinson. Durante un tiempo, Levinson estuvo ayudando, de hecho, a otro de ellos, Sydney Pollack, a desarrollarla. Fue él quien dijo “No quiero hacer una película sobre dos bobos en un coche”, a lo que Levinson le contestó “Dos bobos en un coche es una buena idea. Yo hice una película sobre cinco bobos en una cena. Esto son tres bobos menos y un escenario mejor”.
Según cuentan los rumores, los actores adoptaron la frase de los “dos bobos en un coche” y la hicieron suya. De hecho, Hoffman creía que había cometido uno de los mayores errores de la película, hasta el punto de estar tan falto de interés en el rodaje que, en las escenas de Las Vegas, se iba a jugar a otras mesas ignorando sus escenas, obligando al equipo a tener a alguien que le siguiera a todas partes. Unos meses después, estaba recibiendo su segundo Óscar. Nunca volvió a llamar a la película así, claro está.