A James Gunn hay que quererle como es, porque te regala momentos tan épicos como este
Las primeras películas que rodó James Gunn iban sobre ataques zombies, y las rodaba… en el patio de atrás de su casa junto a sus hermanos. No es que sus padres fueran estrellas del cine y les animaran a hacerlas, ni mucho menos: de hecho, James Gunn Sr, su padre, era abogado, y no vivían en un sitio espectacular, sino en las afueras de St. Louis, Missouri. Sin embargo, tuvo todo el apoyo de su familia y consiguió hacerse un nombre en la industria. Vaya que si lo hizo.
Personas raras en la galaxia
De hecho, todos los hermanos de la familia (Sean Gunn, Matt Gunn, Brian Gunn, Mark Gunn y, por supuesto, James Gunn) se han acabado dedicando a algo relacionado con el cine, desde actores hasta guionistas o escritores. Y, por supuesto, el ahora director de DC le acabó rindiendo un homenaje muy merecido a sus padres por apoyarle en este camino.
Tanto James Gunn Sr como Leota Hynek aparecen brevemente en Guardianes de la Galaxia vol.2, ambos con el móvil en la mano, y lo más curioso es el nombre que su hijo les puso en los títulos de crédito: “Viejo Extraño” y… “La Amante del Viejo Extraño”. No hay como tener confianza en familia.
James Gunn
Quizá Gunn se lo hubiera querido pensar dos veces antes de poner esos nombres si hubiera sabido que su padre iba a fallecer poco después del rodaje, en 2019, a los 78 años. Deja tras de sí una herencia de cine increíble, aunque apenas dejara su impronta en el séptimo arte. Puede que para todos los demás sea el padre de James Gunn, pero para James Gunn era su querido viejo extraño.