El actor pudo comprobar que la reputación de Robert de Niro era merecida durante el rodaje de su tercera película, ‘Jackie Brown’, en la que quedó absolutamente sorprendido
A lo largo de sus más de 30 años de carrera como director de cine, Quentin Tarantino solo ha dirigido 10 películas -9 si contamos Kill Bill: Volumen 1 y Kill Bill: Volumen 2 como una misma pieza-, pero ha tenido la oportunidad de trabajar con algunos de los mejores actores de Hollywood. Ha trabajado con Samuel L. Jackson -en seis ocasiones, nada más y nada menos-, Leonardo DiCaprio, Brad Pitt, Michael Keaton, Harvey Keitel, Bruce Willis, Margot Robbie, Al Pacino, Uma Thurman o Steve Buscemi, entre otros.
La lista es larga, pero en ella hay un nombre especialmente destacado para Tarantino, puesto que haber tenido la oportunidad de trabajar con él se convirtió en la prueba definitiva de que se trata de uno de los mejores actores del mundo. El mejor, de hecho, según admitiría el director de culto en una una entrevista con el periodista Charlie Rose sobre Jackie Brown, su tercera película tras Reservoir Dogs y Pulp Fiction.
Estrenada en 1997, Jackie Brown está protagonizada por Pam Grier en la piel de una azafata de vuelo que compagina su profesión con pequeños trabajos ilegales a las órdenes de un mafioso, pero aunque la actriz es la estrella indiscutible de la película, en su elenco destaca la presencia del gran Robert de Niro.
El actor, que entonces tenía 81 años y ya había ganado dos premios Oscar, interpretó al gánster Louis Gara en la película y con su interpretación terminó de convencer a Tarantino de que su reputación era más que merecida.
“Recuerdo que una de las cosas que le dije fue: ‘Mira, creo que este es uno de los mejores papeles que he escrito. Si tuviera la edad suficiente para interpretarlo, interpretaría a Louis, sí, pero no la tengo. Necesita más edad para que el personaje funcione de verdad’. . Eso es lo que escribió Dutch'”, recordaba Tarantino sobre cómo consiguió que De Niro formase parte de su película. “Y la cuestión es que… es diferente de todos los demás papeles que he escrito porque no se trata de diálogos. No se trata de que el actor diga cosas geniales. Es una actuación que debe hacerse con lenguaje corporal, ¿de acuerdo? Y recuerdo incluso describírselo. Le dije: ‘Quiero que Louis tenga el lenguaje corporal de un montón de ropa sucia’. Y estaba hablando con uno de los mejores actores de personajes de la historia del medio, uno de los mejores actores de lenguaje corporal de la historia del medio. Él puede… logró transmitir esos últimos cuatro años en prisión en la película, donde nunca lo ves en prisión, jamás”.
“Es una gran colaboración. Y me siento un gran honor por eso”, continuó. “Trabajamos muy, muy bien juntos”.
Se merece la reputación de ser posiblemente el mejor actor de su generación. He llegado a la conclusión, tras editar una película suya y ver cada fragmento de metraje, de que es el mejor actor del mundo
“Nunca he visto a un actor sumergirse tanto en su personaje, en un verdadero trabajo de personaje durante el rodaje. Lo que quiero decir con eso es que cuando Robert interpreta a Louis y ves cada fragmento de metraje que has filmado de él, en cada momento él es Louis”, continuó elogiando Tarantino. “Trabaja momento a momento. Algunos actores sugieren algo como que hay un montón de opciones disponibles y cualquiera de ellas es posible y cualquiera es genial. La verdad es que no me lo creo en absoluto. Si realmente estás en el personaje, solo tienes unas pocas opciones”.
No hay duda de que Robert de Niro impresionó a Tarantino, aunque, para ser justos, cabe destacar que en los últimos casi 30 años desde Jackie Brown, Tarantino ha tenido la oportunidad de seguir trabajando con grandes y talentosas estrellas que antes no conocía en las distancias cortas.