¿Sabías que un fanático del cómic en paro es el primer responsable del mayor evento de cultura pop del mundo?

Lo mejor que le puede pasar a una persona en paro que vive con sus padres es tener una idea que lo convierta en millonario. Pero claro, eso pasa muy pocas veces… quizás contadas con los dedos de una mano. Pues bien, es lo que le pasó a Sheldon Dorf, desempleado de 36 años, un día en casa de sus padres en California. Pero no estaba solo, con él se encontraban cinco jóvenes con sus mismas inquietudes: el cómic.
Sin embargo, lo que hoy podríamos pensar como una afición mainstream -el cine de superhéroes, basado en los cómics, suele ser el rey en la taquilla-, en la década de los sesenta era algo muy diferente, más propia de un bicho raro que del molón de clase. Por lo tanto, reunirse en eventos que programaran actividades relacionadas con su gran afición no era ya ocio, sino una simple cuestión de supervivencia.
En un principio, dos de los jóvenes tenían un pequeño negocio de venta de cómic por correo, además del intercambio de correspondencia. Cuando el dúo conoció a Dorf, mayor que ellos dos, sabían que algo debían hacer. Dorf tenía una pasión desde pequeño: las tiras cómicas de Terry and the Pirates y Dick Tracy. Su afición era tal que en 1965 llegó a aparecer en la portada de un periódico debido a su gran colección, que incluía 162 cómics y 12.479 tiras.
Lo suyo era el cómic. Solo necesitaba saber en qué area de negocio desarrollar su afición. Dibujar no era lo suyo, aunque lo intentó. Acabó haciendo guiones en programas como Scooby-Doo o Garfield y sus amigos. Sin embargo, lo que se le daba mejor era establecer contactos; las relaciones públicas, vaya.

Comic Con
En 1969, el grupo formado por Sheldon Dorf y el resto de jóvenes, decidieron organizar una convención de cómics, ya que aquel había trabajado en una de fans en Detroit. ¿Por qué no hacer algo similar en San Francisco? Y todo surgió de una pregunta: Dorf les preguntó si conocían a Jack Kirby. Evidentemente, todos asintieron: Kirby es una de las personalidades más importantes del noveno arte. Sin embargo, a la pregunta ¿Quienes de ustedes lo conoce?, nadie respondió afirmativamente.
Lo que el resto de jóvenes no sabía era que Dorf tenía el teléfono de Kirby. Era, sencillamente, un rey en esto de hacer contactos con gente del mundillo. Pronto organizaron un viaje a la casa del dibujante, y este pasó con el grupo horas, mostrando su arte, posando para ellos en fotos, les aconsejó y estuvo pacientemente respondiendo a todas sus preguntas. ¿Os suena de algo?
Kirby, además de acceder a ser el primer invitado estrella de la primera Comic-Con, les dio un consejo que marcaría el evento para siempre: que no se limitaran a los tebeos, que incluyeran todo aquello que les gustaba a los fans, como el cine, la ciencia ficción, etc. Es, sin duda, el mejor consejo que les podría haber dado y el truco para que haya podido permanecer en el tiempo.
De aquella primera convención en marzo de 1970 al día de hoy ha pasado mucho tiempo y la Comic-Con no ha dejado de crecer. En la actualidad, la Comic-Con es una de las mayores concentraciones globales de fans y profesionales de la cultura pop. Cada año, más de 130.000 personas acuden al evento original, y este año, por primera vez en la historia, atraviesa el charco hasta llegar a nuestra Málaga, con una edición en la que se esperan alrededor de 60.000 aficionados españoles y europeos.
La San Diego Comic-Con Málaga tendrá lugar del 25 al 28 de septiembre en el FYCMA y las entradas ya están agotadas para todos los días, excepto para el primer día jueves. Corre, que vuelan.